Los medios de comunicación y los políticos europeos parecen estar irremediablemente confundidos cuando se trata de hablar sobre EPS e identificar sus aplicaciones.
El poliestireno expandido, o EPS por sus siglas en inglés, representa alrededor del 3% del plástico vendido en Europa. Pero si leemos a los medios de comunicación o los informes de los políticos, parece que fuera el plástico más utilizado.
Se ven titulares del tipo «los envases de un solo uso fabricados con poliestireno expandido desaparecerán» o «los envases para alimentos y bebidas fabricados con poliestireno están prohibidos». No importa que apenas haya envases de EPS de este tipo en el mercado europeo.
Esta confusión no llega solamente desde los medios, sino también los propios políticos que han trabajado para llevar a cabo regulaciones sobre determinados productos de plástico, mostrando claramente el desconocimiento cuando, por ejemplo, en la legislación francesa se refieren a las «botellas EPS», que no existen.
Confusión en los Plásticos de un Solo Uso.
El poliestireno expandido (EPS), es popularmente conocido en España como poliespán o Porexpan® (marca registrada de productos de construcción). El llamado Flamingo, poliestirolo o Styropor en otros países, es objeto de confusión para medios, políticos y legisladores en toda Europa. ¿La razón? La entrada en vigor el 3 de julio de la Directiva sobre plásticos de un solo uso de la UE (904/2019), que prohíbe artículos como las pajitas de plástico y los envases de comida rápida.
El hecho es que los envases que están a punto de desaparecer en la UE casi nunca son de EPS.
Además de la confusión de materiales dentro de la directiva, los medios reducen el texto creando más confusión, como la publicada en el diario español El País, donde con el título “España no llega a tiempo al veto europeo a las pajitas, bastoncillos y cubiertos de plástico de un solo uso” se habla de “bastoncillos de algodón, cubiertos, platos, pajitas, agitadores de bebidas, palitos de globos de plástico, vasos, recipientes para alimentos y bebidas de poliestireno expandido y todos los productos fabricados con plástico oxodegradable” sin aclarar que los envases de EPS (Poliestireno expandido) teóricamente prohibidos únicamente son aquellos que cumplen tres condiciones simultáneamente: que son envases para consumo inmediato o para llevar, que se consuman en el propio recipiente y que no necesiten preparación posterior como calentar, hervir o cocinar. Podemos encontrar otro ejemplo similar en el diario el Mundo, “Pajitas, bastoncillos y platos de plástico quedarán prohibidos desde este sábado en toda la UE”.
La Directiva sobre plásticos de un solo uso restringe el uso de muchos artículos de plástico, pero apenas el EPS, y desde luego no los envases de EPS en general. No se ha prohibido el uso de EPS para sus usos más comunes y esenciales: la protección de los envíos de alimentos al por mayor de pescado, frutas y verduras, equipos electrónicos y eléctricos, electrodomésticos o envíos de vacunas COVID-19.
Por desgracia, la confusión pública sobre lo que es o no es el EPS tiene consecuencias reales. Los legisladores de toda Europa han hecho referencia al EPS en textos legales cuando, con toda seguridad, pretendían referirse a otra cosa, como a los envases de comida rápida tipo «clamshell» o cajas de hamburguesas (que son XPS – véase más abajo). Esto demuestra una incomprensión clara de los usos esenciales del EPS en nuestras vidas. Y en una época en la que las redes sociales pueden hacer o deshacer la reputación, si se difama el plástico equivocado se corre el riesgo de castigar a los productos equivocados y a toda la economía que los rodea.
En aras de contribuir a la lucha mundial contra la desinformación, aquí está el manual de Smart Packaging Europe sobre lo que es y no es el EPS.
¿EPS o no EPS? Esa es la cuestión.
- El EPS está compuesto por un 98% de aire y sólo un 2% de poliestireno. Si un plástico no contiene aire y se envuelve o dobla sin romperse, no es EPS. Algunos periodistas europeos se han referido a los envoltorios de EPS y a cosas como los vasos de yogur. Eso no es EPS, amigos. Una de las razones por las que el EPS se utiliza habitualmente en aplicaciones específicas de embalaje es que no se dobla, pero absorbe los golpes y aísla los productos con eficacia, y utilizando un mínimo de recursos.
- El EPS no es XPS.El EPS es expandido. Es un plástico espumado que se utiliza sobre todo en el aislamiento de edificios, los embalajes y los equipos de protección personal, como los cascos de bicicleta. El XPS es poliestireno extruido, y también tiene diversos usos, el más conocido es el de las bandejas. No son lo mismo, su proceso de producción es diferente. Si se mira un poco más de cerca, se pueden distinguir: Para la producción de EPS, las perlas pre-expandidas y estabilizadas se transportan a unos moldes donde se les comunica vapor de agua y las perlas se sueldan entre sí. Las perlas son reconocibles en el producto final. El XPS tiene una estructura de espuma más fina y densa.
- Si está sumergido en el mar, no es EPS. Es muy sencillo: El EPS flota, así que, si encuentras plástico suspendido en la columna de agua o en el fondo del mar, es casi seguro que no sea EPS. Aunque no queremos ningún tipo de basura (plástico u otros materiales) en el medio ambiente, la distinción es crucial porque sólo el 15% de la basura marina flota en la superficie del mar; otro 15% permanece en la columna de agua y el 70% descansa en el fondo marino, y en general, el EPS no puede parte del 85% que está bajo la superficie.
- ¿Botella, contenedor de bebida de EPS? Probablemente no. El EPS puede proteger las botellas de vino, de cerveza y cualquier botella, pero si se trata de una botella de plástico transparente, probablemente sea PET, que significa tereftalato de polietileno. No es en absoluto lo mismo.
- El EPS no es tóxico. El EPS está permitido como material en contacto con alimentos y se utiliza de forma segura y generalizada desde hace décadas para el transporte de pescado, frutas y verduras frescas, desde el mar o las huertas hasta los mercados de todo el mundo. Durante todos estos años, su seguridad ha sido ampliamente estudiada y confirmada en múltiples ocasiones, incluso por las autoridades de la UE. La sustancia de partida, el estireno, es peligrosa por sí misma, pero cuando se transforma químicamente en el plástico poliestireno, que a su vez se transforma en poliestireno expandido, no es tóxico. Es como la diferencia entre el CO (monóxido de carbono, que es venenoso) y el CO2 (dióxido de carbono, que respiramos). Una pequeña diferencia química puede suponer una gran diferencia en el comportamiento de algo.
Si ves algún otro buen ejemplo de confusión de EPS, ¡háznoslo saber! Estaremos encantados de añadirlo a la colección y aclararlo.
Autor Anape con Smart Packaging Europe